lunes, 19 de octubre de 2009

Entre la cerámica y el molde

¿Existe una verdad única y objetiva de cómo vivir? ¿O acaso cada uno de nosotros tiene su propia verdad, según lo que le toca? ¿Será que la verdad es objetiva, y lo subjetivo es nuestra percepción?

Imaginen un aula donde los estudiantes se encuentran sentados en semicírculo alrededor de un objeto irregular y cada uno tiene que dibujarlo desde su propia percepción. Si quitamos el objeto, y le pedimos a un extraño que venga a ver los dibujos, puede llegar a pensar que se tratan de objetos diferentes dados la disparidad entre los dibujos. Únicamente los estudiantes saben que se trata de un único objeto, absoluto, y que la diferencia en los dibujos se debe a los diferentes ángulos que fue captado.

Nosotros somos como los estudiantes e interpretamos a Hashem según nuestra percepción. Aun así, esto no invalida el hecho de que Hashem y la Torá son una verdad objetiva. Un sabio de la Torá explicó que uno puede vivir en contra o a favor de de D-os, pero uno no puede vivir sin El, por que su existencia es real e irrefutable. Lo subjetivo es nuestra percepción, ya que el ser humano esta condicionado por sus propios valores, su país, medio socio económico y una lista interminable que se la dejamos a los sociólogos.

Esta escrito que la Torá tiene setenta caras. Esto no significa que cada uno haga lo que quiera e interprete la Torá dependiendo de cómo se despertó esa mañana. Seguir los caminos objetivos de la Torá no atenta de ninguna manera la singularidad del ser, por el contrario, ayuda a cada persona a definirse y conectarse con su verdadera esencia.

Seria como la relación entre la cerámica y el molde. La única manera que tiene la cerámica para llevar su potencia al acto, y convertirse en un objeto, es amoldarse. Por que ese limite evita que se desparrame por todos lados. Y desparramarse es desperdiciarse.

2 comentarios:

Margalit dijo...

BS"D

Shalom HaMalka!!!
Gracias por 'activar' en nuestro interior esta capacidad de vernos como cerámica en manos del Artista que sabe, puede, quiere y ama MOLDEARNOS... Gracias... HaShem nos de la capacidad y la entrega para aceptar los LÍMITES que el Alfarero por excelencia quiera darnos.... así, llegado el momento, les seremos 'útiles' y llenas de VIDA VERDADERA, que es la Torat Emet, no sólo un libro para leer y platicar sobre él sino también..... es nuestra auténtica VIDA.

Berajot HaMalka, que tu luz brille como dice el Rabí Natán de Breslov en sus cartas!!!

Margalit

shuly dijo...

m encanto iashar koaj