martes, 14 de septiembre de 2010

Feliz día del padre (un post en donde bato el record en el uso de la palabra perdón)

Ayer mientras escuchaba el shiur de Ruth Shira se me ocurrieron muchas ideas geniales para un post. Si tan solo hubiese llegado a casa y en vez de sentarme a comer el alfajor que me regalaron (no se ilusionen porque no pienso revelar mi fuente) me hubiese sentado a escribir las palabras que tenía en la cabeza, ahora estarían leyendo algo sumamente revelador y trascendente que los hubiese inspirado hasta para seguir con la dieta que empezaron el lunes.

Pero en cambio están leyendo esto. Igual quédense un rato, a ver si entre todos logramos sacar alguna idea. Total serán solo unos minutos que igual perderían en facebook o en twitter o en tumblr o en algún otro blog que muestra fotos de mascotas.

Les voy a resumir un poco la cuestión y, Ruth Shira, por favor corrígeme si me equivoco, porque aunque me viste mirar atentamente el gráfico de la pared, sabes que tengo un límite.

En la clase se hablaba de los tres tipos de relaciones en las que es propicio trabajar en el mes de Tishrei: con uno mismo, con el otro y con Hashem, relación cuyo momento culmine, por supuesto, es Iom Kipur, día en el que debemos entregarnos íntegramente a Hakadosh Baruj Hu.

Pero yo me quedé un paso más atrás en la clase, o más bien dos pasos, o si (no me dejan pasar una), tienen razón, me quedé absolutamente retrasada, pero debo decir que fue por culpa de una nube turbia de pensamientos que secuestraron lo que hay dentro de mi calavera y que se limitan a reproducir sin pausa una cantinela o una diatriba o como prefieran llamarlo, que como una niña recitando en el acto del colegio, enumera todo lo que he hecho mal durante el año.

Es que en estos días hay que hacer teshuvá ¿escucharon algo al respecto? ¿qué me dicen? ¿ustedes por dónde andan? Yo ando marcha atrás porque cuando ya estamos a punto de cruzar la meta, yo estoy volviendo al inicio donde todavía no han bajado la bandera. Es que empecé a revisar todo lo que Hashem va a tener que perdonarme, y eso me hizo recordar que en la relación con el prójimo Él no puede perdonarme nada que no haya sido perdonado por la persona afectada, pero de eso ya hablé el año pasado, y aunque el público se renueva, no vale la pena que repita lo que está escrito en el post de abajo. Así que avancé un poco en mi retroceso (qué linda paradoja) hasta el punto de darme cuenta que Hashem no va a poder perdonarme nada que yo no me haya perdonado a mi misma.

¿Van a estar de acuerdo si ahora digo que esto es muy difícil o van a venir a decirme que nada que ver y que es cosa mia? Porque yo creo que el daño que nos hacemos a nosotros mismos es de la peor calaña. No podemos con la idea de ser tan humanos, de fallar, de equivocarnos. No podemos perdonarnos no ser perfectos y no podemos superar las veces en la que salió al mundo nuestro señor Hyde. Y así seguimos ligados a esas trasgresiones, seguimos estancados. Yo creo que deberíamos trabajar primero en eso.

Y para todas las que estuvieron ayer en la clase, si fue Sartre el que dijo que el infieno son los otros, y porque el que calla otorga, como no lo dije ayer lo digo hoy: no estoy para nada de acuerdo. Todavía es peor que eso, el infierno puede estar mucho más cerca

lunes, 13 de septiembre de 2010

Con el corazón en la boca (o ¿por qué publicamos nuevamente este post? -para hacer bajar el del ayuno que ya terminó hace rato)

A los ocho años me peleé con mi vecina porque no quise darle lugar en mi escritorio para su cuaderno de matemática, la terminé echando de mi casa y gritándole “corta mano corta fierro” mientras se subía al ascensor. A los quince me peleé con mi mejor amiga por lo mismo que se pelean todas las chicas a esa edad y después de una charla infantil en un banco de plaza, la vi alejándose para siempre por la esquina de Corrientes y Pringles. Hasta los dieciocho me peleé con mi hermana por el lugar en la mesa, por el secador de pelo, por cerrar o por abrir la puerta y por cualquier otra cosa que siempre representaba lo mismo. También me peleé con una amiga porque se hizo religiosa y con otra porque no se hizo, con un jefe porque guardé una carpeta en el cajón equivocado y con una desconocida que me vino a decir que mis hijos hacían ruido.

Yo no sé si son reales muchos de estos recuerdos, porque a veces uno sólo se acuerda la historia que se cuenta a través del tiempo, pero sea como sea, lo que sí sé es que a ninguna de estas personas les pedí perdón. Y de eso estoy bien segura, porque pedir perdón es un acto heroico, y un acto heroico nunca se olvida.

No les voy a decir lo que ya saben, no les quiero repetir que respecto a las trasgresiones bein adam leJaveró (cometidas contra personas) no hay teshuvá que valga. Que uno puede afligirse en su corazón todo lo que quiera, pero si no le pide perdón a la persona perjudicada, ese arrepentimiento no sirve para que se borre la trasgresión de nuestra cuenta.

Lo que quiero preguntar es por qué, a pesar de saberlo, elegimos (por única vez) quedarnos callados. Uno preferiría que le dijesen que se aplique veinte azotes, haga dos días de ayuno o recite diez viduy, a que nos pidan enfrentarnos a nuestro prójimo para pedirle perdón.

Ya vendrá alguien a decirme que esto no es verdad y que durante estos diez días de teshuvá lo más normal es escuchar a la gente diciendo: “perdón por cualquier cosa que te haya podido hacer” “perdón por si te ofendí en algo”. Pero yo no me estoy refiriendo a esos casos sin sustancia. Me estoy refiriendo a ese caso específico en el que ahora están pensando.

Y ese es el perdón difícil de decir, ese es el perdón que se queda atorado en la garganta y que no quiere salir. Lo que tenemos que saber es que no hay otra forma de hacerlo: hay que golpear una puerta, poner el corazón en la boca y decirlo.

domingo, 12 de septiembre de 2010

Ayuno de Guedalia -צום קל Ayuno fácil

Revisa nuevamente el post Como Sobrellevar El Ayuno

Este ayuno fue decretado por nuestros Sabios para conmemorar el asesinato de Guedaliá, el hijo de Ajikám, a manos de Ishmael, hijo de Netaniá, instigado por el Rey de Amón. Con la muerte de Guedaliá se extinguió la última llama de autonomía judía luego de la destrucción del primer Beit HaMíkdash. Miles de personas fueron masacradas, y aquellas que sobrevivieron fueron conducidas al exilio.

Cuando Nabucodonosor, rey de Babilonia, destruyó el Beit HaMíkdash, y condujo a los judíos al exilio, permitió que un remanente permaneciera en la Tierra de Israel, nombrando como gobernador a Guedaliá. Los judíos que habían escapado a Moav, Amón, Edóm y otros países vecinos, regresaron a la tierra y cultivaron las áreas que el rey babilónico les había asignado. Cuidaron los viñedos y gozaron de un nuevo respiro de su anterior opresión.

Pero la tregua fue demasiado breve. El rey de Amón era hostil y envidioso, y así fue que envió a Ishmael para que asesinara a Guedaliá.

En el mes de Tishrei, Ishmael salió al encuentro de Guedaliá en la ciudad de Mitzpá. Aunque Guedaliá había sido prevenido respecto de las intenciones de Ishmael, no creyó en los informes que recibió, considerándolos una calumnia. Guedaliá recibió a Ishmael y le rindió grandes honores. Ishmael asesinó a Guedaliá y a muchos de los judíos presentes, así como también a la guardia caldea que Nabucodonosor había asignado a su gobernador. Aquellos judíos que permanecían en la Tierra de Israel temieron la inevitable venganza del rey babilónico y huyeron a Egipto. Así, el remanente que había quedado en el país se dispersó y la tierra quedó desolada.

En conmemoración de estos trágicos acontecimientos, los Sabios establecieron "el ayuno del séptimo mes" en el día del asesinato de Guedaliá.

lunes, 6 de septiembre de 2010

No encuentro mi artzeinu (para seguir desinspirando)

De niña pensaba que los problemas se resolvían dividiendo treinta manzanas entre seis niños, entregándole la tarea a tiempo a la maestra y pidiéndole a mi papá zapatos nuevos. No había mucho más que estudiar la tabla del seis y comportarse como una niña buena para que la vida fuese como uno quisiese que fuera. Causa y efecto: el que toma toda la sopa, crece sano y fuerte.

Con los años la (ilusa) ilusión de que las cosas siempre tienen solución se fue evaporando. Crecer en la época de la dictadura debe haber contribuido para que mi visión pasase sin escalas del blanco al negro. De golpe me encontré confundida por un mundo en donde alguna gente se divorciaba, otros ganaban la lotería, algunos se enfermaban y otros construían una casa en las Bahamas. Lo que no te toca hoy, te toca mañana.

Ladies and gentleman, ahora me toca confesar que a pesar de los años, la experiencia y la teshuvá definitiva, según el día, el estado de mis hormonas y los carbohidratos consumidos, sigo creyendo que así o asá.

Si me porto bien, hago toda la tarea y me lavo los dientes antes de ir a dormir, Hashem va a darme todo lo que yo quiera. Esos son los días en los que me pongo de pie ansiosa hasta llegar a shemá koleinu para exponer mi lista de pedidos que deberán serán respondidos porque ayer doné 180 shekels para vaad harabanim.

En la etapa "a ver quién paga el pato" camino por un campo minado, aterrada por el destino de la próxima bala, aliviada cuando mis cartas son buenas pero aplacando la culpa por estar bien anticipándome en la angustia para cuando esté mal.

Ustedes que me están mirando por la pantalla, ya se habrán dado cuenta de que mis dos versiones fallan en el mismo punto: El papel que Hashem cumple en mi vida. En la primera, yo puedo controlarlo, Hashem está ahí para servirme y para cumplir mis deseos porque ¿quién mejor que yo para saber lo que me conviene? En la segunda, no me hago cargo de nada porque las cosas simplemente pasan, Hashem sabrá por qué lo bueno y por qué lo malo, pero yo no tengo nada que ver con eso y este mundo no es el lugar para entenderlo. Asi que una de dos, o yo controlo a Hashem, o Hashem me controla a mi.

Hacia el final del post podría ponerme a dormir en los laureles porque después de todo, está en el aire en estos días, en las clases que se escuchan y los artículos que se leen. Sólo con escribir frases como: "coronar al Rey" "despertar con el sonido del shofar" y "aceptar que estamos en el mundo para servirlo" sacaría las papas del fuego, pero la verdad es que no tengo en claro nada de esto. Lo máximo que me atrevo a decir es que espero llegar a Rosh Hashaná un poco más ubicada. Entendiendo cuál es Su lugar y cuál es el nuestro.

martes, 31 de agosto de 2010

Debbie en su cocina - Torta de Miel

Debbie volvió a su cocina para enseñarnos esta riquísima torta de miel especial para Rosh Hashaná (perdón por la baja definición del video, es que después de tanto tiempo perdimos un poco la mano)


Es muy importante seguir el orden de la receta.
2 vasos de azúcar
1 vaso de miel
1 vaso de aceite
2 vasos de café
1 cucharadita de polvo de hornear
1 cucharadita de bicarbonato de sodio
3 huevos
4 vasos de harina

viernes, 20 de agosto de 2010

Una Cuestión de Actitud (Post de Chispita)

Todos tenemos un trabajo único que realizar en esta vida,‬ y por la marcha, nos llegan nisionot que nos duelen y molestan y tratamos de evitarlos a toda costa. Para ello, muchas veces, yo opto por ponerle anestesia a mi vida para que esta sea más llevadera. Esta anestesia se presenta de diferentes maneras: la casa, el trabajo, libros…incluso los chicos!

Cuando va pasando el tiempo y miro hacia atrás, he notado mi triste tendencia a pensar que salí victoriosa en la mayoría de los casos: Ja! Que genial! como zafé de esa! Pude sobrevivir y sin mayores daños!

QUE HORROR!

Que trágico pensar que de eso se trataba: aplicarme una long-life epidural para no enfrentar lo que realmente tengo que hacer. ¿Qué me habrá hecho pensar que el objetivo era sobrevivir, y no simplemente vivir? Y ¿quién me dijo que lo primero era mejor que lo ultimo?

Hay veces que siento que mi ietzer me tiene atada a una silla de ruedas espiritual, y me impide hacer lo que debe hacerse. Pero a pesar de esta conciencia momentánea, sigo sentada cómodamente en esta silla que el ietzer hara – que amable, don! – me preparo con tanta dedicación, mientras observo cómo pasan los nubes por mi ventana. A lo mejor esperando que haya un milagro que me ayude a reaccionar, o se dé el momento apropiado según mi discernimiento. Y mientras todo esto pasa por mi mente, la arena del tiempo se escabulle sin tregua entre mis dedos sin sospechar siquiera que la solución era tan simple como pararme de la silla, cerrar la ventana, y ponerme a trabajar.

miércoles, 18 de agosto de 2010

Emergencias Médicas (Otro Post de Johana)

Hola, me voy a presentar formalmente, me llamo Johanna y vivo en Israel hace 8 años.

Tengo el merito de haber sido una de las “escogidas” por HaShem para trabajar en una profesión muy difícil , interesante, única y muy especial que es la de “ser medica”, y no solo eso también tengo el merito enorme de poder hacerlo en ERETZ ISRAEL. Sin ninguna duda mi trabajo es AVODAT KODESH, o en otras palabras “una mitzva”. Como muchos saben incluye shabatot, jaguim (festividades), ayunos, etc. Si si, no es fácil y sobretodo para la que B”H es madre y esposa, aunque muchas veces tengo que dejar de pensar en “¿qué es lo que a mi me gustaría hacer?” sino preguntarme “¿qué es lo que quiere Hashem de mi?”

Quería compartir con uds una escena que se repite todos los días en las salas de emergencia, en mi caso de Pediatría, pero seguramente a todo médico y todo familiar de un enfermo le va a resultar conocido:

La madre llega a la guardia con su bebe en brazos luego de haber sido derivada desde el ámbito ambulatorio con una carta de su medico en sus manos la cual utiliza palabras que ella no comprende y todas referidos a su bebe. Su rostro esta pálido, la vos le tiembla y su celular siempre suena .

Mi papel en ese momento es interrogarla, revisar a la criatura, explicar los pasos a seguir y tranquilizarla en los buenos casos. Para que no le sea traumático por lo general le pido que se siente a esperar mientras yo procedo a extraer sangre y orina. Y ahí esta ella o ellos (madre y padre o madre y abuela) rezando con lagrimas en sus ojos , con miedo a lo que pueda llegar a ocurrir con lo mas preciado para ellos, temiendo que llegue el momento en que el medico (yo) les de una mala noticia y el futuro de su hijo se oscurezca.

Luego de una hora cuando analizo todo el cuadro, veo la evolución del niño y tengo los resultados de los estudios, llego con una sonrisa a hablar con ellos y por lo general les explico que no es grave, que no necesita ser internado y les doy un tratamiento. Aquí quería llegar….DE REPENTE, la situación da una vuelta en 180 grados. Los padres se relajan, les vuelve el color al rostro, comienzan a reír y…. A SEGUIRME POR TODO EL HOSPITAL!!!!, DOCTORA, CUANDO NOS DA EL ALTA, POR FAVOR, NO PODEMOS SEGUIR ACA, POR FAVOR…..

Y ahí procedo a explicar que se llenen de paciencia ya que hay otros niños que podrían estar en “peligro de vida” y tengo que verlos antes de escribir el alta para ellos.

De repente comienzan a deambular por la sala de un lado al otro , a reír y a conversar por celular en voz alta sin importarles los demás pacientes , y cada vez que cruzan su mirada con la mía me hacen gesto de “danos la carta de alta" como si pedieran un café en un bar!!!

Quería compartir con uds esta escena para compararla con aquella que nuestro Padre vive año tras año cuando llega el mes de ELUL:

Durante este mes nosotros seriamos la madre preocupada que llora y reza por la vida de lo mas querido para ella, acercándonos a Hashem como nunca y hasta dispuestos a cambiar o a dar todo. Así le rogamos a Hashem que nos inscriba el “libro de la vida” a nosotros y a todos nuestros seres queridos. Y como la naturaleza del ser humano es OLVIDAR RAPIDO y pensar en uno mismo, una vez que pasa el JUICIO o que ya sabemos que nuestro bebe no esta en peligro….uuufffff, volvemos a lo de siempre…

Que con la ayuda del creador este mes de Elul podamos TRABAJAR DURO para cambiar nuestras malas cualidades , fortalecernos en emuna y en amar al prójimo , PERO que todo este trabajo PERDURE también para cuando el juicio YA PASO!!!

domingo, 15 de agosto de 2010

Teshuvá

Kotel 1865

Conviene que todo hombre se vea a sí mismo a lo largo del año como si fuera mitad inocente y mitad culpable; y lo mismo el mundo entero: mitad inocente y mitad culpable.
Si comete una sola falta, inclina la balanza hacia el lado de la condena, para sí mismo y para todo el mundo, provocando su destrucción; si realiza una sola buena acción, inclina la balanza hacia el lado de la absolución para sí mismo y para todo el mundo, y produce salvación y redención.
Al respecto está escrito: "EL hombre justo es el cimiento del mundo" (proverbios 10:25), es decir: aquél que obra bien, hace preponderar la absolución para todo el mundo, y lo salva.

(Hiljot Teshuvá 3:4 - Rambam)

sábado, 14 de agosto de 2010

Teshuvá

Kotel 1883

Existen tres componentes fundamentales de la teshuvá: la renuncia al pecado que se ha cometido, la teshuvá y la confesión.

¿Qué significa "renuncia al pecado"? La persona que transgrede debe desistir a cometerlo, quitarlo de sus pensamientos y decidir no repetir nunca más la desagradable acción.

¿Qué significa "teshuvá"? la persona debe comprender sinceramente que el abandono de D´s es amargo y perjudicial. Debe tomarse a pecho el hecho de que la transgresión conlleva castigo y retribución, y que por lo tanto debe hacer teshuvá de la transgresión cometida.

¿Qué significa "confesión"? la persona debe reconocer verbalmente lo que ha hecho, diciendo: "He pecado al hacer tal y cual cosa. me arrepiento de lo que he hecho, estoy avergonzado, y jamás volveré a hacerlo"

Fuete: Nosotros en el Tiempo. E. Kitov

jueves, 12 de agosto de 2010

Teshuvá

Kotel 1906

Cada ser humano tiene méritos y faltas. Aquél cuyos méritos son más que sus faltas, es un hombre justo. Aquél cuyas faltas son más que sus méritos, es un malvado. Si se igualan en cantidad, es un hombre intermedio. Lo mismo ocurre en una ciudad : sí los méritos de sus residentes son más que sus faltas, es una ciudad justa; si sus faltas son más, es una ciudad malvada. Lo mismo se aplica al mundo entero.


(Hiljot Teshuvá 3:1 - Rambam)

miércoles, 11 de agosto de 2010

Teshuvá

Kotel 1910

Tanto la Teshuvá como el Yom Kipur sirven
para expiar exclusivamente las transgresiones
cometidas contra D´s, por ejemplo, comer algo
prohibido, pero no las cometidas por un hombre contra
su prójimo, como es el caso de quien golpea a su
prójimo, o lo maldice, o lo despoja. Estas cosas
jamás le son perdonadas hasta que dé a su prójimo todo
lo que le debe y se reconcilie con él. No basta con
que le devuelva el dinero que le debe: está obligado a
reconciliarse con él y pedirle que lo perdone; incluso
si no hizo más que mortificar al prójimo con sus
palabras, debe disculparse e insistir hasta que le
perdone.

(Hiljot Teshuvá 2:9 - Rambam)

martes, 10 de agosto de 2010

Teshuvá

Kotel . 1942

Teshuvá perfecta es la del hombre que, al
presentársele la oportunidad de repetir el pecado que
antes cometió, se aparta y no lo comete a causa de su
arrepentimiento, y no a causa de temor o de
imposibilidad física.

(Hiljot Teshuvá 2:1 - Rambam)

Desde una caldera urbana (un post desinspirador)

¿En serio? ¿después de tres semanas en las que el mercurio batió records? ¿después de haber estado encerrada con un enjambre de niños salvajes parecidos a los mios? ¿Después de días y noches en los que me viste ordenando palabras en cajas de texto, ejecutando los copy paste, los send to back y los bring foward que deberán pagar la cuenta del psicólogo si sigo en este ritmo?

Seriously? Si ni me acuerdo de cómo era mi vida antes de esto a lo que sarcásticamente llaman vacaciones. Si recién acabo de cerrar la puerta después de entregar a mis hijos al sistema educativo.

¿Ve emet? Si no se puede negar que por hache o por ve muchas colapsaron y están en la misma que yo. A las pruebas me remito y trascribo las frases que las delatan. Por ejemplo Debbie (escribiendo mails desde un iPad que se le adelanta en el tipeado y le cambia las palabras): "iguana la estamos pasando bien" "ya tengo Hamas de volver a la rutina". O Jannah (dudas halájicas): "estaba diciendo que las cucarachas son horribles y me quedé petrificada frente a la duda de si está permitido hablar lashón hará de las cucarachas". Y Andi: (aparenciendo en Skype con frases para títulos de post) "somos mamás de moldes" y " las migas del muffin hasta el fin". ¿No nos merecemos una prórroga?

Davvero? ¿No te di suficiente lástima? ¿ni siquiera al notar mi desesperación porque cuanto más me alejo más se acerca? Si esta vez hiciste que aparezca como salido de la galera, yo ni llegué a escuchar abracadabra. ¿A mi me parece o esta vez no contamos 365 días entre este elul y el del año pasado?

真的Ahora parece que estoy hablando en chino. Mejor lo digo en criollo: ¿No lo dejas pasar? Solo por esta vez. Todavía no estoy lista para enfentarme a la teshuvá, la tefila y la tzedaká. Estoy como desincoronizada, en kislev digamos. Hacé que hoy sea feriado, el día de la independencia. Sólo para descansar un rato, un día de no hacer nada. Si sabés que siempre llego preparada, que soy de las que saca las llaves tres cuadras antes. Pero hoy no. Rosh Jodesh Elul, por favor, mañana

lunes, 9 de agosto de 2010

jueves, 5 de agosto de 2010

La Montaña Rusa (Post de Johana)


B”h puedo hablarle a mujeres como yo que atravesaron un proceso de cambio único y decisivo en nuestras vidas - la TESHUVA- , acercándonos a la verdad y al creador del universo. La mayoría de nosotras tuvimos a nuestra familia (lo mas sagrado) en contra diciéndonos que nos estábamos equivocando y que podíamos cometer una locura. Pero ahí estaba ÉL agarrándonos fuerte y ayudándonos a salir de cada prueba y prueba, llenándonos la vida de “milagros” imposibles de olvidar. Y ese espacio vacío , nuestra ALMA, comenzaba a llenarse y empezábamos a darle sentido a esta vida llena de materialismo y mentiras. Sentíamos una guerra interna entre la maravillosa sensación que reposaba ya en nuestra alma contra todo lo aprendido e inculcado por las personas que nos educaron con tanto amor y dedicación. Ese nuevo mundo y antiguo a la vez , que nos alegraba por dentro y fuera y nos iluminaba el rostro.

Sigamos…luego llegamos a la cima de la felicidad, ya decididas y entregadas a “la verdad”. Algunas nos casamos para formar un bait neeman be Israel, las que ya lo estaban tuvieron mas hijos, cambiaron a sus hijos a un colegio con valores judaicos verdaderos . Y todo siempre acompañados por el ejemplo de los rabanim, tzdikim verdaderos, que añorábamos llegar algún día formar un hogar lleno de kedusha y con la shjina (presencia divina) o un “beit a mikdash”, como el de ellos

Luego : comenzábamos a DAR como recibimos a gente que se estaba acercando, y preocuparnos por cada iehudi y iehudi, sufriendo por los “alejados “, tratando de dar el ejemplo para que vuelvan al camino , sintiendo AMOR por cada integrante del pueblo de Israel y por la Tierra. Ese espacio, nuestra ALMA seguía llena todavía y nos amoldábamos reincorporando a nuestras vidas cosas que creíamos eran prohibidas y elegíamos nuestra línea dentro de tantas líneas.

Y al fin llegamos a la segunda etapa , la que no llego todavía siga disfrutando, pero la que ya llego ATIENDAME: ETAPA DE CAIDA ESPIRITUAL

Esta escrito en los libros que todo baal teshuva pasa por esta difícil etapa y puede ser en distintos grados: leve, moderada o severa .

  • Síntomas :

1- tristeza, aburrimiento y depresión (no se asusten)

2- dificultad y nuevos yetzeres en mitzvot como TEFILA (nos cuesta rezar y sentimos que nuestras tefilot vuelven vacías). SHABAT (no sentimos la kedusha como la de hace un tiempo atrás , no sentimos descanso espiritual) TZNIUT (nos vemos feas, queremos cambiar el look por algo mas moderno)

3 - y el síntoma mas importante: NOS SENTIMOS LEJOS DE HAKADOSH BARUJ HU, ese que nos sacaba de cada prueba y prueba y hacia milagros en cada momento sentimos que NOS ABANDONO!!! Si, nuestro padre se aleja para que nosotras lo busquemos por nuestros propios medios.

Si esos son tus síntomas, no te avergüences!!! Repito: está escrito en los libros sagrados que en el proceso de teshuva hay que pasar también por la CAIDA.

  • Diagnóstico: SINDROME del VACIO INTERIOR .
  • Pronóstico: si no lo tratas pronostico reservado PERO…. si lo tratas bien, esto es bueno!- presta atención: se puede llegar a un nivel altísimo, se llega al SHLEMUT (plenitud ) y ALEGRIA para la eternidad!!.. – (tercera etapa)
  • Tratamiento:: crecimiento interior, RE-BUSQUEDA del CREADOR del UNIVERSO
  • Efectos adversos del tratamiento: Puedes cambiar tu linea a una linea de jasidut
Y ¿cómo se logra? Uno de los métodos mas efectivos que yo he encontrado a sido por medio del HITBODEDUT!!! (próximo POST bs”d bli neder)

B"H que en este jodesh Elul podamos tener el mérito de acercarnos a HaShem por medio de la TEFILA, TESHUVA Y TZEDAKA. Para teshuva y tzedaka hace falta TEFILA y para la TEFILA misma hace falta pedirLe a HaShem poder hacerla todos los dias con el corazón.

Comentario: algunos fragmentos fueron extraídos de charlas con mi colega y amiga la Rabanit J. K. J

martes, 3 de agosto de 2010

Shalom!!! (ya era hora de un post de Margalit)

Bueno realmente no sé por dónde comenzar..... Quizás la mejor manera sea presentándome: Soy Margalit Bat Abraham Abinu, Bat Sara Imenu... Si soy gioret, Baruj HaShem!!! Privilegios si los hay.....

Muchas veces nos preguntan –a mi esposo y a mí (él también es ger, el giur lo hicimos juntos después de casados)- ‘¿qué te lleva a cambiar de ‘religión’?’....

Es una pregunta fácil.... difícil... nueva y antigua, reiterativa y aislada... Para mi, para nosotros, es ‘la’ pregunta.

Como bien me dijo alguien: ‘No se amanece un buen día y se decide hacerse judío, así porque sí’.... En mi fue un proceso de años, de decantación y de desencanto, de luchas conmigo misma y con los de afuera.... fueron años de preguntarme: ¿y qué hago ahora frente a esta VERDAD? Muchas veces la disfracé, otras la enfrenté y me enojé con ella porque tiraba al piso mi castillo-refugio.... Pero cuando no di más.... Cuando lloré toda una noche y empecé mi duelo y despedida de mis antiguas tradiciones y.... relaciones..... HaShem estuvo ahí.... Y me hizo tomar de la mano de dos personas que nos entendían muy bien (no se olviden: mi esposo también estaba en pleno proceso): nuestros Avot: Abraham y Sara..... Por eso cada vez que hago Tefila en los Pesuke beZimra y llego al relato agradecido del cambio de nombre de Abram por Abraham sé lo que se siente.... esa letrita ‘h’ es todo un universo escondido y revelado... En esa letra radica el cambio... En esa letrita estamos ¡¡todos!! Baruj HaShem!!!

A partir de ese momento empezamos el camino que nos llevaba a nuestro hogar, a nuestra ‘familia’... A ustedes....

Hubieron quienes nos recibieron y ayudaron y apoyaron (nuestro Knis de ‘nacimiento’, mi mora Devora, mis javerot de estudios).... Fue un proceso donde no faltó nada y donde siempre estuvo presente que queríamos ser.... iehudim... simple, sencilla pero verdaderos y reales iehudim...

A la pregunta del millón, la que se hace siempre: ‘¿Por qué quiere cumplir 613 mitzvot cuando con 7 (Los preceptos Noádicos) usted ya estaría cumpliendo su parte?’ Contesté: ‘Si usted tuviera una mesa servida, llena de manjares... ¿se conformaría sólo con una muestra de ellos?’. Quien me la hizo me sonrió y ahí empezó todo.

Fue maravilloso estudiar y.... poner manos a la obra. Nunca me costó el cubrirme la cabeza ni el tema del cuidado del tzeniut... Bueno si, me costó porque mi alma guaraní necesitaba de colores estridentes y de muchas flores!!! Pero... ¿qué es esto frente a todo lo que recibimos a cambio? ¡¡LA VIDA MISMA!!

El broche de oro de nuestro giur, fue llegar a Israel. El broche fue estar frente al Beit Din y responder las preguntas y recitar el Shema con el corazón en la boca. El broche estuvo en Beersheva donde pasamos por Tevila y fuimos recibidos como ‘hermanos’ y recibimos nuestro nuevo nombre. El broche estuvo en Yerushalaim donde el Rab Eliahu Birinbaum –siempre tenga semajot!!- nos casó ese 26 de Tishrei 5763. El broche estuvo cuando pudimos llegar a Hebron, Ir HaAvot, y estar frente a quienes nos ‘dieron’ su nombre para que no estuviéramos solos.... sin un ‘antes’, sólo con el ‘después’.

¿Qué más puedo añadir? Valieron la pena cada lágrima, cada risa, cada renunciamiento, cada subida y cada bajada. Porque después de todo como dice Rabenu HaKadosh, Rebe Najman miBreslov –z”l-, NO EXISTE TAL COSA COMO LA DESESPERANZA. NO HAY MITZVA MÁS GRANDE QUE LA DE ESTAR SIEMPRE ALEGRE. CADA DÍA PODEMOS HACERLO NUEVO, CADA DIA ES NUEVO... Y ANTE CUALQUIER DUDA: EL HITBODEDUT ES LA RESPUESTA

Quiero sólo agregar que les agradezco: Jana, Judi, Debbie y todas las demás porque..... ustedes, sin saberlo son el lugar donde todas nos encontramos: las amamos y necesitamos. KADIMA!!! Y.... JODESH ELUL lleno de semajot y preparadas a recibir al Melej que sale al Campo.... Berajot!!!

martes, 27 de julio de 2010

Hitbodedut

Ya que Johana puso el tema de Hitbodedut en su comentario aprovechemos el momento para leer sobre el tema en este libro que amablemente comparte eduplanet: Hitbodedut: El Arte de Conversar con Hashem

A modo de introducción les dejo la respuesta que da el Rav Menajem Abdeljak a la pregunta:

¿QUÉ SIGNIFICA HITBODEDUT?

Conversar con D´s en mi idioma, con mi vocabulario y mi singular estilo, esto es HITBODEDUT. "Es como conversar con un íntimo amigo", nos enseña Rabí Najman.

No solamente en tiempos dificultosos, cuando las cosas se tornan complicadas, sino a diario hay que buscar un momento y un lugar tranquilo y ahí con tus simples palabras conversar con Hashem.

El HITBODEDUT, de acuerdo a las enseñanzas de Rabí Najman, significa expresarse delante del Todopoderoso abiertamente, conversar con él explayadamente.

¿Te parece que no tienes nada para decir? ¿Cómo es posible eso? ¿Y qué pasa con todas esas sensaciones que nos circulan por el corazón a diario o incluso varias veces al día? ¿Cuántas cosas nos perturban? ¿O cuántos deseos que nunca pudimos satisfacer por uno u otro inconveniente? ¿Quién no tiene algún problema sin resolver, o una duda sin descifrar? ¿Acaso puede alguien afirmar que ningún miedo lo perturba? ¿Y que pasa con las incertidumbres? Qué hacer, a dónde ir, qué decisión tomar, etc. ¿Cuántas dificultades y peligros atraviesa el pueblo judío en estos momentos? ¿Tenemos derecho a desatendernos de nuestros hermanos que sufren y esperan la salvación de D-ios? Y nosotros mismos, ¿no necesitamos también de la ayuda divina para nuestra salud y bienestar? ¿Por la educación de nuestros hijos en tiempos de deterioración de valores? ¿Y en general por todos nuestros seres queridos, familiares, compañeros, etc.?

Todo esto, y mucho más detallado, hay que convertirlo en una conversación íntima con nuestro Creador.

lunes, 26 de julio de 2010

Añorando la cresta de la ola (un post de Andi)



Ayer tuve unos pensamientos interesantes en mi insomnio que se disolvieron con la luz de la mañana. Algo acerca de cuando éramos chicos y jugábamos a barrenar olas con aquel barrenador blanco de tergopol. Y pensaba qué divertido era TODO. Esperar que venga la ola perfecta, grande, barrenarla, quedar sacudidos por otras olas y finalmente terminar comiendo arena en la orilla descostillándonos de risa para entrar de nuevo. Y cuando estuve en Puerto Escondido fue igual. Me acuerdo de que las olas te sacudían hasta escupirte en la orilla y no podíamos parar de reír.


Y pensé todo esto porque antes se me cruzó una típica imagen mía de estos últimos años: unos ratitos de iluminación, superconectada, re-tzadeket, barrenando la ola a lo pantera rosa antes de pegarse con el palo, y yo antes de quedar comiendo arena. Y todo el tiempo que estoy tirada, caída, no sólo me pregunto cómo llegué hasta aquí, sino que extraño barrenar la ola perfecta. Y llego al punto en que el agua me da miedo y me parece que está un poquito fría y me puedo quedar tanto pero tanto tiempo añorando la cresta de la ola, que me termino alejando de ese mar que cada día me resulta más distante.


Y aquí estoy: muerta de aburrimiento, sitiada sin saber que estoy sitiada. Y habiendo olvidado y sepultado en mi interior a la niña que simplemente TODO le parecía divertido. No solo barrenar. También sacudirse, también caerse.


Entonces cuando la semana pasada vi un video y unas fotos de mi misma de estos últimos meses, me horroricé pensando: ¿¿¿quién es esta señora???? ¡¡En qué me convertí!! Para luego echarle la culpa a la peluca, a mi ropa de preceptora, a mi teshuvá, a mis 40 años y a todo lo que se me ocurrió en ese momento. Cuando en realidad esa señora es la que se olvidó a la niña en la playa hace mucho tiempo. Y toda vez que alguien aplaudía para recordarle o preguntarle: ¿Esta niña es suya? La señora la miraba extrañada preguntándose cómo puede ser que todavía no le hayan puesto a esa niña una chapita con su nombre y su número de carpa para que cuando se pierda pueda volver a su lugar, con sus papás.


Be´ezrat H" que pronto todas podamos volver a casa, con nuestro Papá y nuestras niñas reveladas en los rostros y en la risa a más no poder.

jueves, 22 de julio de 2010

Somos siempre las mismas

En este momento me pregunto qué pensarán ustedes acerca del post que están a punto de leer. ¿No es verdad que al leer un título uno piensa que ya sabe lo que le van a decir? Por ejemplo, sé que Andi leyó "somos siempre las mismas" y enseguida supo que yo iba a comparar a la niña que fui con la mujer que soy en la actualidad para concluir que a pesar de ser adulta y poder quedarme despierta hasta la hora que quiero, justamente la hora en la que quiero irme a dormir es la misma en la que mis padres me obligaban a acostarme. Y Andi podría haber tenido razón, lo hubiese dicho.

O Yami, que cuando leyó "somos siempre las mismas" pensó que este sería el relato del cumpleaños de Debbie en Lattecini y en una milésima de segundo pasó de la indignación a la resignación de tener que leer ese título el día que ella no vino. Y Yami podría haber tenido razón porque yo le había prometido esa crónica titulada "todas menos una" (fetuccini y ravioli, bla bla, todavía te debemos el regalo, bla bla, la moza cantando el feliz cumpleaños en castellano, bla bla y adiviná quién comió pescado después de habernos atiborrado a pescado en los nueve días).

Y Margalit, que leyó "somos siempre las mismas" y pensó que hablaría de nuestras neshamot frente al monte Sinai. O Jannah, que se dijo a sí misma "ya era hora de protestar porque siempre sean las mismas las que comentan en el blog". Y si, también podrían haber tenido razón.

Pero no. Lo que voy a decir es que eso mismo hacemos con las mitzvot: aprendemos el título y seguimos adelante. Por ejemplo: si el título de la mitzvá es "alejarse de la falsedad", no profundizamos y cuando nuestro hijo nos pregunta si nos gusta su dibujo, le contestamos que ese mamarracho enmarañado no parece una casa con jardín y que se olvide de ser Picasso. Porque la Torá nos obliga a decir la verdad.

Si el título es: "visitar al enfermo" caemos de sorpresa a la hora de la siesta y aprovechamos para resolver algunos temitas de trabajo por teléfono mientras nos comemos los chocolates con la inscripción "que te recuperes pronto". Porque la Torá nos obliga a visitar al enfermo.

Y no me atrevo a hablar de las atrocidades cometidas bajo los títulos "corregir, corregirás a tu compañero" o "lashon hará letoelet" porque todos las hemos sufrido y conservamos las heridas.

Así que al final era esto: que somos siempre las mismas interpretadoras de títulos, que no vamos más allá porque ya sabemos todo y... aquí me detengo porque ya saben el resto.

Estamos trabajando

Estamos muy ocupadas lavando ropa, comiendo carne, escuchando música y comprando cosas nuevas. No se vayan que ya volvemos.