viernes, 10 de octubre de 2008

Los Ushpizin I

Una costumbre esencial en Sukkot es la invitación de los Ushpizin, los huéspedes celestiales de nuestra herencia. De acuerdo con el Zohar, los Ushpizin tradicionalmente incluyen los tres patriarcas, Abraham, Itzjak y Iaakov, así como Moshé, Aaron, Iosef y el Rey David. 


Cada uno de los Ushpizin personifica una sefirá y un rasgo de la personalidad. Abraham – jesed (amor y bondad); Izjak – gevurá (moderación y fuerza personal); Iaakov – tiferet (belleza y verdad); Moshé – netzaj (eternidad y dominio por medio de la Tora); Aaron – hod (empatía y receptividad al esplendor divino); Iosef – Iesod (santidad y fundación espiritual); y David – maljut (el establecimiento del reino del cielo en la tierra). 


Hay una pelicula que se llama precisamente asi: Ushpizin. Filmada en Israel en el 2004, del director Giddi Dar. Los actores: Shuli Rand, Michal Bat Sheva Rand, Shaul Mizrahi, Ilan Ganani.


Es la historia de una pareja de Moshé (un hombre profundamente religioso) y Mali (una mujer de dulce corazón) y se desarrolla durante la festividad de Sucot. Moshé y Malí, son interpretados por el guionista del film (Shuli Rand) y su esposa en la vida real (Michal Bat-Sheva Rand). Rand estaba retirado de la actuación por abrazar un sendero religioso (tal como el de su personaje) y fue hasta esta pelicula que volvió a la actuación. Y de hecho, la inclusión de su esposa en el reparto fue uno de los requerimientos impuestos por el actor/guionista para hacer esta cinta, un hombre no está completo si no está unido a su esposa.


Usphizin es inusual, bella, conmovedora.Te invito a que la consigas y la disfrutes…

Sitio oficial: http://www.ushpizin.com/

1 comentario:

Anónimo dijo...

Esta película ha sido una de las mejores que haya visto en los últimos meses... La historia que presenta está cargada de emociones y de contenido religioso que conmueve a cualquiera, en especial al ver el amor de Dios hacia los hombres y que nada pasa por casualidad, por lo que necesitamos ser pacientes y combatir el buen combate de la Fé.